Luz y Sonido

Hay otro elemento básico en esta clase de eventos que no puede no estar, y es la música. Como bien dijo Frank Zappa hace ya casi cuarenta años, la música es la más física de las artes, y se nota que tenía razón en la medida de la respuesta de la comunidad a esta clase de circunstancias. Ya sea emulando bailes de una nación totalmente diferente a la nuestra o pegándole a la guitarra y descosiéndola con un riff que te desarma la cabeza, la música y su representación no fueron para nada la nota mala de este evento.

Coreografías

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Postergadas eternamente hasta el segmento final del evento, la gente de Kichiigo Idols se presentó a bailar sus coreografías delante del público, de una manera más vivaz que en la pasada vez que pudimos presenciar su trabajo. Trabajaron plenamente a favor la puesta en escena y el ambiente que brindó el Grupo Daruma; luces, sonidos y espacios estaban tan bien dispuestos que permitían a las bailarinas brillar sobre el piso del Galpón 11.

No vimos en principio nada demasiado nuevo, pero vale aclarar como aclaramos en la reseña anterior que nuestro ojo no está preparado para calificar esta clase de arte (todavía :P). Lo que sí pudimos notar fue una muchísima mejor elaboración y un cuidado más regular de detalles, como ser el vestuario y el manejo del espacio.

Bandas

Gesshoku

Ya nos habíamos encontrado con la gente de Gesshoku en el Daruma J-Rock el año pasado, y no dejaron decaer su estilo y su energía en este evento tampoco. Lástima que, otra vez por falta de recursos, no pudimos entrevistarlos; hubiese estado bueno leerles unas palabras y registrarlos acá.

Con un repertorio que sabía mover a la audiencia, Gesshoku tocó temas que te levantan la temperatura de la sangre (por lo menos si creciste viendo estas series), y se movió en el escenario acorde a la canción que sonaba de fondo. Para recalcar el trabajo del Sonidista que, como en la entrega anterior, no defraudó para nada. Entre los temas más violentos (en el buen sentido del término), tocaron We Got Power, Shima Uta, un Ending de Samurai X (no pudimos determinar cual :P), Butterfy, un tema propio de la OST de Naruto, Haruka Hanata y su perla preferida, Fighting Dreamers, otra vez con el bajista corriendo al lado del cantante. En un momento se subió el cantante de Sephiroth (con el que todavía no pudimos cruzar palabra) y tocaron la colosal Pegasus Fantasy, un toque más al majestuoso despliegue que dieron de sus habilidades

La calidad de sonido es horrible, pero bue, es lo que pudimos conseguir. Gracias a quien haya filmado este video :P

El único punto relativamente flojo fue (aunque desconocemos si por causa de la banda o por dificultades técnicas) el hecho de que la voz femenina quedaba muy relegada a otro plano, y en esta clase de género esto no puede pasar. Si bien mejoraron este detalle con respecto al año pasado, es un punto que tiene que seguirse trabajando.

Fuurin Kazan

Una banda nueva en nuestro oír, Fuurin Kazan tocó y sonó bastante bien. Aunque desconocemos gran parte de la data al respecto de ellos y no pensamos repetir información que pueden rastrear en el sitio del Daruma Party, es obligatorio que pongamos algo sobre ellos. Fuurin sonó bastante bien, con una voz femenina que predominaba y sabía anclarse en el escenario con firmeza. Tocaron una infinidad de temas que no tenemos la más puta idea de qué eran, pero eso es por incapacidad nuestra :P

Entre otros, tocaron temas como Broken Rose (en una muy buen display, podemos decir), The Real Folk Blues, Again (bastante copada), The World y, una vez más, Pegasus Fantasy (que, junto con Chala Head Chala, es la única canción que no cansa oir más de una vez )

Realmente no hay puntos para darle ñaska a esta banda. Sonaron bien y no jorobaron ningún aspecto; por ahí podría decir que la voz de la cantante no daba para hacer algunas voces que originalmente son masculinas, pero seria ponerme en histérica porque realmente tienen un muy buen trabajo. Ovación de pie para estos muchachos.